Nadya, la justiciera de la Liga

La
historia de Nadya Chiarotti, la primera mujer árbitro en la Liga Santafesina
de Fútbol.
Siempre
hay una primera vez. En este caso se trata de la primera mujer que dirigió un
partido de hombres en la máxima categoría de la Liga Santafesina
de Fútbol. La protagonista se llama Nadya Chiarotti y desde el 3 de octubre de
2014 fue la responsable de administrar justicia –como decían los viejos
relatores de radio– entre Colón y La
Salle. “Tengo un muy buen recuerdo de ese partido, con los
nervios típicos de cualquier debut, pero me sentí muy conforme”, aseveró la
mujer que nació hace 30 años en Villa Constitución. “Los jugadores pretenden
que lleves adelante de la mejor manera un partido, y algunos pueden tener el
prejuicio de que dirige una mujer, pero no noté que tuviesen la intención de
hacerme sentir el debut de una forma especial, o que piensen que me tienen que
probar para ver cómo reacciono”.
Antes
de Nadya, el protagonismo del arbitraje femenino entre los caballeros también
tuvo su primera vez en el panorama nacional. La tucumana Florencia Romano fue
la encargada de abrir el camino. Marcar ese rumbo no le fue fácil; en agosto de
1996 Romano decidió enviar una carta documento a la AFA en la que le solicitaba su
incorporación a la nómina de árbitros profesionales. Nunca hubo respuesta, y en
una enérgica medida la tucumana comenzó una huelga de hambre en la puerta de la
casa mayor del fútbol argentino. Florencia argumentaba discriminación de género
laboral.
A Julio
Grondona no le tembló la voz al afirmar: “No es sensato que una mujer dirija un
partido de fútbol entre hombres”. La frase cayó en ofsside y el 24 de
septiembre de ese año fue llamado por las comisiones de Deportes, Derechos
Humanos, Legislación del Trabajo y la de Familia, Mujer y Minoridad de la Cámara de Diputados de la Nación. Al finalizar la
audiencia Grondona cambió su opinión y manifestó que “Florencia va a ser
probada como todos los árbitros; todos van a tener la posibilidad. No va a
haber inconvenientes y las mujeres podrán arbitrar igual o mejor que los
hombres”.
El 4 de
abril de 1998 jugaron Victoriano Arenas y Muñiz en la Primera D; Florencia
Romano pitó el principio y final. “La
AFA es una mafia y su presidente Julio Grondona un mafioso,
por eso yo lo llamo Don Corleone”, declaró la rebelde Florencia y la carrera de
la tucumana cayó en desgracia.
Hubo
una primera Florencia para que existan muchas Nadya interesadas en dirigir. Las
mujeres ganaron terreno en el fútbol, afuera y adentro de la cancha, y apareció
en la historia del fútbol santafesino Nadya Chiarotti, que desde hace cinco
meses dirige la
Primera División de nuestra Liga.
Luego
de hacer historia con aquel encuentro entre Colón y La Salle, vinieron otras
designaciones, entre la que se destaca Santa Fe FC-Las Flores, “ese partido fue
muy especial porque por primera vez en la historia de la Liga se eligió a un cuarteto
femenino”.
Fútbol
en todos sus roles
Nadya
hizo el curso de árbitro a nivel nacional y comenzó a entrar a las canchas en la Liga Nicoleña. “Por
cuestiones de la vida solicité el paso a la Liga Santafesina
y acá estoy”, aseguró y se le escapó una sonrisa. Y confesó que el fútbol le
gusta desde chica, pero recién lo practicó de más grande “por cuestiones de
prejuicios, por esas cosas de creer que sólo lo podían jugar los hombres, pero
hice lo que tenía ganas de hacer y formamos un hermoso grupo de amigas jugando
fútbol 7 en Villa Constitución y nos metimos a jugar futsal en Rosario”.
A los
23 años se preguntó: “¿Qué estoy haciendo acá adentro?”. La pasión ya le había
ganado, Nadya dirigía el primer partido de su vida en una divisional de
inferiores de la Liga
Nicoleña.
¿Machismo?
“Adentro
de la cancha, a la hora de sancionar un fallo que al público no le parece
correcto, en lo primero que reparan es en mandarme a lavar los platos, es el
típico insulto”, manifestó sonriente. Tomó aire y muy segura reflexionó: “Este
trabajo que elegí solamente se puede hacer si te gusta, porque de lo contrario
todo se hace doblemente costoso: el entrenamiento, estar adentro de la cancha
llevando adelante un partido, los insultos de la gente. Las mujeres que deciden
ser árbitros lo hacen porque les gusta mucho”.
En el
inconsciente colectivo de la sociedad futbolística se considera que las chicas
que dirigen tienen que tener “mucho carácter”. Ante esta afirmación, Chiarotti
afirmó: “Estoy de acuerdo en parte. La parte en la que coincido es cuando te
puede tocar un jugador que pretende sobrepasarse en reclamos por verte mujer, y
es ahí donde hay que dejar en claro que las mujeres estamos a la altura de las
circunstancias y no por la condición del género va a ser diferente a otro
árbitro. Y la parte que no acuerdo pasa simplemente por una cuestión que
arranca por el respeto, y para que seamos respetados por los jugadores primero
tenemos que ser respetuosos nosotros con ellos, seamos mujeres u hombres”.
Roberto
Carreño es palabra autorizada en el arbitraje local, estuvo al frente del
Colegio de Árbitros en la
Liga Santafesina y cuenta con la sabiduría de la experiencia:
“A la mujer le cuesta el doble, porque además de gritarle las mismas cosas que
nos gritan a los árbitros varones, por más que acierte en los fallos y esté
pegada a la jugada, le van a protestar, porque lo primero que tiene incorporado
el varón es que la mujer no sabe nada de fútbol”.
La
preparación
Nadya
tiene incorporada la vida deportiva desde pequeña. La práctica del tenis,
voley, natación y fútbol, más su incursión por el profesorado de Educación
Física fueron una buena base para sobrellevar un “entrenamiento duro”, tal como
calificó la preparación que afronta un árbitro de elite. “Nosotras tenemos que
estar doblemente preparadas para dirigir hombres, sobre todo en la parte
física. Técnicamente es una cuestión de práctica y reglamentariamente, una vez
que ya están incorporados los conceptos, no cuesta porque generalmente suceden
las mismas jugadas”.
Chiarotti
entrena con otros tres árbitros (varones) santafesinos que fueron contratados
por AFA, uno de ellos es Gustavo Rossi, que es asistente internacional. “La
preparación consiste en sesiones físicas de cinco días a la semana, que transcurren
entre una hora y media y dos”. En este aspecto, Carreño aseguró que Nadya se
entrena como una profesional para estar a la altura de un encuentro del
Argentino A o Nacional B, “que es mucho más rápido que uno de la Liga”, explicó.
Chiarotti,
además de dirigir en el fútbol de nuestros barrios, desde febrero de 2014 viene
siendo asistente de partidos del Argentino A (actual Federal A). 
Antes
que la nota vea la tarjeta roja por no respetar los tiempos de la entrevistada,
el grabador se apagó. Nadya tenía que preparar su bolso para luego viajar a
Salta. En el norte del país la esperaba un partido del Federal A, donde le tocó
ser la jueza de línea (asistente en términos más modernos) entre Gimnasia y
Tiro y Andino de La Rioja.
Publicada en Pausa #150, miércoles 25 de marzo de 2015.
Pedí tu ejemplar en estos kioscos de Santa Fe y Santo Tomé.

Dejar respuesta

Por favor, ¡ingresa tu comentario!
Por favor, ingresa tu nombre aquí