También las están matando

En Santa Fe, militantes y activistas se organizan para dar batalla contra la violencia de género.

Los crímenes de corte transfóbico se suman al pedido de Ni Una Menos. Organizaciones reclaman justicia por Fernanda Olmos y un tratamiento periodístico alejado del morbo.

Mientras los reclamos por Ni una menos se replican en diversos países y en las provincias argentinas, el concepto de homolesbotransfobia hace eco, se instala y complejiza el análisis de una ola violenta que cada año se cobra demasiadas vidas. Sin dudas, los recientes asesinatos de la militante trans Diana Sacayán en Buenos Aires, Marcela Chocobar en Río Gallegos y Fernanda Coty Olmos en Santa Fe movilizaron la escena y la lucha de numerosos colectivos toma un nuevo impulso.

El pasado 13 de noviembre, en el marco de las 5tas Jornadas de Extensión y Cultura de la UNL, se realizó un taller denominado Heterosexismo/Homolesbotransfobia. La actividad, coordinada por Emmanuel Theumer, se propuso abordar marcos generales para comprender la discriminación por orientación sexual y expresión de género. Con el objetivo de contribuir a su memoria, se puso el acento en los recientes femicidios trans ocurridos en nuestra provincia, analizando su tratamiento mediático.

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El pedido de justicia por el asesinato de Coty Olmos signó el taller sobre heterosexismo y homolesbotransfobia desarrollado en la UNL.
El pedido de justicia por el asesinato de Coty Olmos signó el taller sobre heterosexismo y homolesbotransfobia desarrollado en la UNL.

El taller contó con participación las activistas Alejandra Ironici y Noelia Trujillo, y las organizaciones sociales Las Safinas, Revuelo Diversidad y el Movimiento por la Integración Étnico, Sexual y Religiosa, entre otras. El taller finalizó con una convocatoria abierta frente al Ministerio Público de la Acusación para pedir que avance la investigación por el crimen de la trans Fernanda Olmos, ocurrido el 25 de septiembre en su hogar de barrio Alfonso. “El cuerpo contaba con múltiples agresiones que demuestran el grado ensañamiento con el que habitualmente castigan las corporalidades trans”, señalaron los organizadores de la movilización.

“Denominamos de esta forma al taller porque el heterosexismo y la homolesfotransfobia son dos de los conceptos que circulan con mayor intensidad en Argentina y también en parte del activismo LGBT vinculado a las políticas sexuales, al menos en la historia reciente. Queremos problematizar los términos que vamos a debatir: el reconocimiento social y el reconocimiento a la diversidad sexual, pensando tanto en la orientación sexual como en diferentes expresiones vinculadas a la identidad de género. De algún modo los términos heterosexismo y homolesbotransfobia intentan comprender la función social que tiene la discriminación, el hostigamiento y la expulsión social en nuestra misma sociedad, paradójicamente. El acento está puesto en ver algunas expresiones de estas formas de discriminación hacia la diversidad sexual, y para ello tomamos como corpus a la prensa gráfica en Santa Fe, recuperando algunos casos recientes vinculados a asesinatos de corte transfóbico y su cobertura, para indagar estas cuestiones que atañen al reconocimiento pero también al respeto a la identidad de género autopercibida”, explicó Emmanuel Theumer a Pausa.

[quote_box_left] Se vienen observando notables incrementos en los marcos de violencia machista materializada en el gran número de femicidios y travesticidios a lo largo y ancho de país. [/quote_box_left]

Y cuestionó que “en varios medios no se ha respetado ni se ha tomado la suficiente cautela al momento de abordar y respetar la identidad de género autopercibida de muchas de nuestras víctimas a las que hoy les rendimos memoria. En el caso de Coty Olmos, pese a que ella tenía un cambio registral, buena parte de la prensa divulgó su nombre anterior. Fue un episodio tristísimo y creo que tiene que ver con la premura que motiva divulgar el hecho noticiable y también con el morbo, con el público que consume crímenes relacionados al sexo. Eso atañe a la responsabilidad y a la ética periodística. Parte del activismo santafesino ha demandado esta atención porque si bien hay una contracara en la revisión editorial, sobre todo en las publicaciones online, es una constante y en los últimos años lo podemos observar claramente”.

En esta línea, Theumer expresó que “la violencia trans y la de género se vinculan si tomamos en cuenta las modalidades de control del cuerpo tanto en relación a la mujer pero también de la fuerte hostilidad que se desprende de la heterosexualidad obligatoria. Para el caso de las experiencias trans, esto es muy fuerte. De algún modo la visibilidad trans creciente en el espacio público alimentó una serie de reacciones que hoy podemos problematizar y conceptualizar en términos de femicidios trans, y de hecho parte de los repertorios de protestas actuales vinculados a Coty Olmos y Diana Sacayán están interesados en denunciar estos homicidios bajo los gravámenes de femicidio y de odio hacia la identidad de género que nuestro actual Código Penal establece y contempla. Este es uno de los dilemas actuales que abordamos en el taller, porque algunas modalidades de procesamiento como los juicios abreviados prescinden de estos gravámenes para ejecutar las modalidades cortas de enjuiciamiento”, objetó.

El pedido local

Finalizado el taller, los representantes de las organizaciones que apoyaron la convocatoria se concentraron frente al Ministerio Público de la Acusación exigiendo avances en la investigación del crimen de Fernanda Olmos. En este sentido, solicitaron una nueva audiencia y realizaron ante el fiscal Jorge Nessier un pedido para que se respete la identidad de género, para lo cual exigieron que se incorpore a la carátula el agravante por identidad de género (Art. 80, Inc. 4) y femicidio (Art. 80, Inc. 11) del Código Penal. Sobre este punto, Emmanuel Theumer relató: “Hicimos un pedido expreso de justicia porque la causa permanece impune y entendemos que es un ejemplar de este recrudecimiento vinculado a la violencia de género, en este caso toma forma a través de un femicidio trans, que la sociedad argentina está viviendo en el último tiempo y cuyos términos de visibilidad y sensibilidad social se han intensificado en los últimos meses”.

En representación de la Unidad Especial de Homicidios, Jorge Nessier y Cristina Ferraro recibieron a los manifestantes y ante ellos ratificaron que aún no se cuenta con ningún imputado por el crimen. A su vez, aseguraron que tomarán declaraciones a diferentes testigos para dar con los culpables materiales del asesinato.

[quote_box_right] “Los asesinatos de las chicas trans quedan en el olvido. Ahora queremos seguir el caso de Coty para que no quede impune como tantos otros homicidios”, lamentó la activista local Noelia Trujillo [/quote_box_right]

Durante la movilización, la activista local Noelia Trujillo lamentó que “los asesinatos de las chicas trans quedan en el olvido. Ahora queremos seguir el caso de Coty para que no quede impune como tantos otros homicidios”. Y Alejandra Ironici reflexionó: “la comunidad trans está atravesada por una marquesina en la que sólo importa quién es la primera y nos olvidamos que nos están matando. Hoy estamos pidiendo que las mujeres se sumen a nuestro reclamo porque en esta provincia falta compromiso social, somos siempre las mismas caras pero no vemos una empatía desde la sociedad heteronormativa”.

En un comunicado que se publicó tras la convocatoria, las organizaciones apuntaron: “Se vienen observando notables incrementos en los marcos de violencia machista materializada en el gran número de femicidios y travesticidios a lo largo y ancho de país”. Y exigieron “políticas públicas antidiscriminatorias a la altura de las circunstancias”.

Publicada en Pausa #166, miércoles 25 de noviembre de 2015

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