Y la banda sigue tocando

Rafael Gutiérrez, un factor crucial de la impunidad.

Inundación 2003: planteos dilatorios de Marcelo Álvarez y cerco judicial en torno a Carlos Reutemann.

Un nuevo pedido de prescripción y una objeción al cierre de pruebas por parte de Marcelo Álvarez continúan difiriendo el dictado de sentencia en la causa que investiga la inundación de 2003.

En octubre de 2015 los defensores del ex intendente Marcelo Álvarez presentaron por cuarta vez una solicitud de prescripción de la causa penal. Además, plantearon una revocatoria a la clausura del período de presentación de pruebas. Tras el rechazo del juez Octavio Silva, el expediente pasó a Cámara. Como no quedan magistrados en la circunscripción judicial local que no hayan intervenido en algún momento del proceso (que ya lleva 13 años), la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe resolvió que se sorteara entre los cuatro camaristas disponibles en Rafaela y Vera. Resultaron asignados los doctores Juan Manuel Oliva y Hugo Degiovanni, de la Perla del Oeste, y Mario Enrique Balestieri de la ciudad del norte provincial, que deberán definir sobre ambos cuestionamientos de Álvarez.

La sentencia que no llega

La causa inundación se inició en mayo de 2003. Junto a Álvarez, en abril de 2006 fueron procesados por estrago culposo agravado por la muerte de 18 personas el ex director de Hidráulica provincial Ricardo Fratti y el ex ministro de Obras Públicas Edgardo Berli. El ex gobernador Carlos Alberto Reutemann nunca fue indagado ni imputado; solamente atestiguó por escrito (amparado en sus fueros de senador) en dos oportunidades, la primera en 2004, cuando la causa aún no tenía imputados firmes, y la segunda en 2013, ya en la etapa de producción de pruebas.

En su segunda declaración, Reutemann no dio precisiones sobre el control de la defensa oeste de la ciudad antes de la inundación y reiteró, como ya había dicho la primera vez, que nadie le avisó sobre el comportamiento del río Salado.

En 2008 el fiscal Norberto Nisnevich requirió la elevación a juicio, pero recién en 2011 comenzó la instancia definitoria, que prosigue hasta el día de hoy y que incluyó la etapa de pruebas. Durante esta última, los acusados, la Fiscalía y los actores civiles (Jorge Castro y Milagros Demiryi) debían introducir documentación y proponer testigos que avalaran sus respectivas posiciones.

Los defensores del ex intendente no hicieron ningún aporte ni convocaron a un solo testigo, pero ahora objetan que dicha etapa del proceso se cierre. No es casual: su estrategia era ir por la prescripción, pero en esta ocasión debieron “condimentar” con otro planteo ese recurso, porque ya les fue negado en tres oportunidades.

Todo puede pasar

Si los cuestionamientos de Marcelo Álvarez se encuentran con un nuevo rechazo, el expediente volverá a manos del juez Silva y se podrá arribar, de una buena vez, a la sentencia final. Pero como dijeron a Pausa fuentes cercanas: “En esta causa todo es posible…”.

Y así es. Fundamentalmente, porque pese a que nunca fue involucrado como correspondía por los funcionarios actuantes, Reutemann se sabe responsable del crimen hídrico. Y entonces, la banda judicial que lo respalda –con su primo político, el presidente de la Corte Suprema de Santa Fe, Rafael Gutiérrez, a la cabeza– se ocupa de operar para que no se llegue a una condena, en un expediente que mancha abiertamente al senador mudo.

 

Declaraciones

Algunas frases de Reutemann en sus testimoniales de 2004 y 2013:

  • “Por la crisis en que entró el país (en) 2001, no se obtuvo el financiamiento del Estado Nacional para la concreción de la obra (tramo III de la defensa oeste de la ciudad)”.
  • “Una eventual evacuación era de competencia exclusiva de la Municipalidad”.
  • “En todo momento estuve al frente de la catástrofe. (Pero) luego debí abocarme (al) resto de las localidades de la provincia”.

Publicada en Pausa #171, edición de 28 de abril de 2016.

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