Las autoridades coincidieron en que después de dar una respuesta al hambre lo fundamental es abordar el tema de la educación como principio rector de las políticas públicas para generar igualdad de oportunidades.
El ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta; el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti; el intendente de Rosario, Pablo Javkin; y el rector de la Universidad Nacional de Rosario, Franco Bartolacci, firmaron este martes un convenio para adherir al Plan Nacional de Lectura, una iniciativa federal que tiene como objetivo la formación de lectoras y lectores. En sus discursos, las autoridades coincidieron en que después de dar una respuesta al hambre lo fundamental es abordar el tema de la educación como principio rector de las políticas públicas para generar igualdad de oportunidades.
El Plan Nacional de Lectura es un programa del Ministerio de Educación de la Nación que trabaja en todo el país para la formación de lectoras y lectores. Así lo establece la Ley de Educación 26.206, sancionada en 2006. El equipo está integrado por representantes que trabajan en cada una de las 24 jurisdicciones educativas del país y articulan políticas públicas de promoción de lectura a través de cinco coordinaciones nacionales. La provincia de Santa Fe integra la Región 4 junto con Entre Ríos, Corrientes, Misiones, Formosa y Chaco. El programa está destinado a llegar a 10 millones de niños, niñas y adolescentes de los niveles primario y secundario.
La distribución de libros estará apoyada por una red federal de mediadores, para acercar la lectura como un acto cotidiano. Y habrá un Consejo Asesor encargado de definir los libros a editar. Además, el Estado desarrollará contenidos en formatos digitales.
“El 70 por ciento de los hogares más vulnerables no tiene libros en sus casas. Y hay una definición que nos ha transmitido el presidente Alberto Fernández: que el Estado tiene que asumir la ruptura de esas desigualdades. El Plan Nacional de Lectura no es sólo la adquisición y distribución de libros. También tenemos que lograr que esos libros, al llegar a nuestras escuelas, sean abiertos, que podamos reinstitucionalizar los espacios de la lectura recreativa, compartiendo media hora de lectura entre los maestros, los niños, niñas y adolescentes. Quien lee descubre otros mundos, desarrolla un pensamiento crítico y construye su vocación, su capacidad y no sólo la transformación individual sino ser parte del enorme desafío de la transformación colectiva”, expresó, frente a una Biblioteca Argentina colmada de público. Y agregó: “Este Plan implica la construcción de la conciencia colectiva y valorar la industria del conocimiento”.
El ministro habló, además, de las desigualdades. “Buscamos que todas y todos tengan los derechos a la lectura que tuvimos los hijos de los sectores medios, porque lo que para nosotros está dado, en el sociedad no lo está; hay que construirlo. En una Argentina desigual, tenemos escuelas del siglo XIX, sin agua potable, sin luz y con letrinas, y también escuelas que están a la vanguardia de la formación de conocimiento en sus aulas por lo edilicio, por los docentes y por los niños y niñas que asisten, con un capital simbólico que no se los garantizó la escuela, se los garantizó la cuna en donde nacieron. Y la democracia tiene que garantizar que sin importar dónde te tocó nacer, las escuela sea esa herramienta de ruptura de la desigualdad”.
Perotti habló de las deudas del Estado con la educación y llamó a no mirar para otro lado. “Hay leyes que no cumplimos”, dijo, y mencionó la obligatoriedad de la educación secundaria y la del jardín de 4. “Nuestro compromiso es que a partir de marzo ningún chico esté fuera del sistema educativo, y esto seguramente va a ser una complicación, porque va a exponer las cosas que nos faltan. Y eso es lo que queremos: poner los problemas sobre la mesa para resolverlos y no esconderlos”, dijo el gobernador. “Esconder cifras no nos lleva a un buen resultado. Los informes preliminares que cotejamos en cada uno de los departamentos habla de 8 mil niños y niñas que no están anotados en la sala de 4 o que habiendo terminado séptimo no están anotados para iniciar la escuela secundaria”.
El gobernador habló de la necesidad de trabajar en forma articulada con los municipios para solucionar estos problemas. “Vamos a ir a la casa de cada uno de los chicos, vamos a hablar con los padres que quizá no tuvieron la posibilidad ni pone en valor que su hijo vaya a empezar la secundaria. A esos chicos hay que acompañarlos para que cruce el umbral que para nosotros es normal. Esto tiene que ser normal para todos”, dijo, en consonancia con lo expuesto por Trotta.
En tanto, Bartolacci celebró la posibilidad del encuentro de diferentes sectores políticos y niveles de gobierno para la firma del convenio y destacó: “Formar lectores es un camino valorable para que cada chico y cada chica tenga una expansión en la formación de su pensamiento propio, donde la realidad de cada uno de ellos es la única realidad posible de ser pensada”.
Fuente: elciudadanoweb.com