Con los últimos datos oficiales, se observa que con Javier Milei el país vive la mayor caída en la cantidad de empresas privadas desde 2003. Desde marzo de 2024, el cierre de empresas no tiene freno.
La perorata liberal insiste sobre los incentivos a la iniciativa privada, el clima de inversión, la seguridad jurídica, la estabilidad, "cumplir los deberes", la reforma laboral y el resto de pelotudeces con las que ajustaron, subdesarrollaron, empobrecieron y endeudaron al país por cuatro períodos desde 1976, o 25 años de los últimos 49: lo único real es que cuando gobiernan liberales, las empresas se destruyen. Durante 21 meses de gobierno de Javier Milei, a agosto de 2025, se destruyeron 19.164 empresas privadas. Es muchísimo. El cierre de empresas representa una contracción del 3,7% en la cantidad total de empleadores.
En 2024 se perdieron 13.509 empresas privadas formales, con trabajadores registrados en ART. Se esperaba que con el verano hubiera un repunte por razones estacionales. No sucedió. En ocho meses de 2025 se perdieron 6948 empresas más.
Puntualmente, con Milei van 18 meses corridos de destrucción de empresas, en la comparación interanual. La cantidad de empresas a agosto de 2025 estuvo 1,6% abajo de agosto 2024 y un 3,5% abajo de 2023.
La serie histórica completa muestra que gracias a los gobiernos liberales de Mauricio Macri y Javier Milei, y descontando el impacto de la pandemia, la cantidad de empresas privadas en agosto de 2025 apenas supera la de agosto de 2007.
Para pasar más en limpio estos datos, se puede decir que con Néstor Kirchner la cantidad de empresas formales creció un 53%. Estaba partiendo del pozo de horror de la crisis de 2001. Entre 2003 y 2007 se crearon casi 171.000 empresas. En promedio, 3100 empresas nuevas por mes.
Sin embargo, con CFK también hubo un crecimiento, próximo al 8% en sus dos períodos. Se crearon más de 41.000 empresas nuevas. En promedio, 430 empresas nuevas cada mes.
El último gobierno de línea popular, el Frente de Todos de Alberto Fernández, tuvo que enfrentar la pandemia. Tuvo un impacto brutal: entre diciembre de 2019 y el punto de mayor impacto, septiembre de 2021, se destruyeron 23.290 empresas.
Sin embargo, la recuperación después fue firme y el saldo final es de un aumento del 0,4% en la cantidad de empresas. Se crearon casi 2300 empresas nuevas comparando diciembre de 2019 y noviembre de 2024.
Estas últimas cifras del tiempo del coronavirus cobran mayor significación cuando se observa que con Mauricio Macri se destruyeron 23.900 empresas. Para la empresa privada, Mauricio Macri fue peor que el coronavirus. Por mes se destruían casi 500 empresas, en promedio.
Aun así, no se compara con el efecto devastador de Javier Milei. Durante su gestión desaparecen 913 empresas por mes, en promedio. Tiene un poder destructivo que duplica al del macrismo.
Pasando en limpio los datos, se ve muy claramente cuál es el efecto de cada modelo económico para la iniciativa privada empresaria. En los modelos liberales se destruyen empresas, en los modelos populares se crean empresas. Ni siquiera la peor crisis de toda la historia del capitalismo –el coronavirus– logró que un gobierno de signo popular termine su mandato sin dejar más empresas privadas que antes de empezar.
Las fuentes
Así como la AFIP publica en su boletín cuáles son las empresas registradas que pagan sus impuestos y hacen aportes a la ANSES, la Secretaría de Riesgos de Trabajo da cuenta de datos similares a partir de los seguros de trabajo que tienen los empleados. No es una encuesta, es un registro.
A partir de esa información se puede reconstruir cuántos empleadores había en mayo de 2003 y cuántos hay hoy, según el último dato disponible (agosto de 2025). También, se puede observar qué sucedió en cada gobierno.








