Tazas chinas
Cinco tacitas chinas cayeron al piso y se rompieron en pedazos, cuando las barrieron quedó una montaña de polvo blanco, escombros diminutos y flores...
Una mujer
Cuelga el teléfono, quizá sospeche con temor que su vida cambió para siempre. Sin saberlo, acaba de sacarse por última vez el guardapolvo de...
Un tal Garz o Garcé
Una vez lo vi en una estación de servicio, bajó de una 4 x 4, no sé qué compró; lo imaginaba más alto, tenía...
La rubia
Vivía sola en una casa grande que quedaba lejos de todo. Hacía poco me había separado de la mujer con la que vivía en...
Plazas
La primera que recuerdo es la del Soldado, un arenero donde con amigos ocasionales practicábamos tomas de judo y peleas de Titanes en el...
Malabar
No sé, fue como un cortocircuito y empecé a manotear el aire y a escuchar las clavas pegando en el asfalto, la última me...
Una fiesta variopinta repleta de invitados y de invitadas
La columna literaria Variopinta, de Federico Coutaz, inicia su décimo año de publicaciones en las páginas de Pausa. Una breve historia en palabras de...
Las palabras y los crotos
I
En algún lugar de Córdoba, al menos hasta los 90, había un hotel abandonado o a medio construir donde paraban mochileros y saltimbanquis. Se...
Vuela patas
El comandante Ramón explica con fingida convicción aspectos elementales de la guerra a una lamentable columna que acaba de incorporarse a las FAL, hace...
Un peregrino
“El calor ardía más que el fuego que habíamos dejado en el camping y entraba junto al viento, dándonos lengüetazos secos en la cara”.
Disfrute...