El presidente de la Nación lanzó un nuevo formato de lo que fuera el Procrear el pasado 10 de julio y la Mesa Ejecutiva del Colegio de Arquitectos de Santa Fe expresó cinco días después, tras analizar el plan gubernamental, su “inquietud y preocupación” por la repercusión que la actual línea de créditos pueda tener en los profesionales de su matrícula, sobre todo los independientes y los más jóvenes, y en la construcción en general.
Iniciado en junio de 2012, el plan original apuntaba a la construcción de la casa propia como un modo de aliviar el déficit habitacional y fortalecer la cadena económica de la construcción. Sin embargo, los 25.000 créditos del nuevo Procrear serán sólo para compra de vivienda nueva o usada, de hasta un millón y medio de pesos, y no admitirán la construcción sobre terreno propio. “Esta política que apunta a fomentar la compra de viviendas a los fines de desarrollar el mercado inmobiliario y el negocio de los bancos privados, deja afuera a los profesionales independientes” dicen desde el Colegio, señalando que además se deja afuera las constructoras pequeñas y que se quita el “protagonismo de la familia en el proceso de construcción de su propia vivienda”, fuera de que además deben pagar “el costo de negocio inmobiliario”.
