En exclusiva para las y los socios de Cine Club Santa Fe y de periódico Pausa, durante la cuarentena y mientras el América permanezca cerrado, todas las semanas el mejor cine para ver en casa.
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Ahora, las recomendadas del presidente del CCSF, Guillermo Arch, para esta semana.
Marco Bellocchio es uno de los directores sobrevivientes de esa segunda generación de directores italianos que tomaron la posta del primer neorrealismo italiano (en el cual militaban Visconti, Rosellini, Pasolini y Vittorio de Sica) al punto que comparte con Bertolucci el año de sus primeras películas, 1962: es decir, uno de los autores vivos de la filmografía italiana que ya figura en la historia del cine, vaca sagrada, dinosaurio o como gusten decirle. Pero imposible encontrar alguna nota vetusta en sus últimas obras y para comprobarlo está Sangre de mi sangre, que contaba con temas de Metállica reversionados en coros medievales o el genial vampiro que asistía al dentista (obviamente, su mejor amigo). Pero también un poco a contrapelo de lo que sería la cima de una carrera marcada por la introspección, el saldar deudas o un perfil personalísimo, sus últimas dos obras han sido por encargo. Tal es el caso de Dulces sueños y la película que recomendamos esta semana, El traidor de la mafia, que por el nombre del director y la temática gatilla una comparación automática con obras de la talla de El padrino o Buenos muchachos... y no le va nada mal. Potenciado el tema por tratarse de un hecho real con sicilianos que hablan en siciliano.
El griego Efialtes condujo a Jerjes por el paso que utilizaron los Persas para atacar y derrotar a Leónidas en la batalla de las Termópilas. Se dice en Grecia que el nombre de Efialtes es sinónimo de traidor. En el sur de Italia, Buscetta, el protagonista de esta película, menta lo mismo.
DeSvelado
Semana all’italiana esta. Loro –los otros- de Paolo Sorrentino es nuestra recomendación para el trasnoche. Obra que sigue episodios (algunos ciertos, otros no) de la vida de Silvio Berlusconi, encarnado por el genial Toni Servillo: un tobogán de excesos y esteticismo dignos del autor de La grande bellezza.
Cine Estudio
Continuamos repasando la obra de Hitchcock. Jamaica Inn o La posada Jamaica de 1939 es la última obra del “período inglés”, ya que con el inicio de la guerra Hitchcock emigraría para triunfar en Hollywood. Película atípica en su carrera (aunque no es la única, es un film de época) mantiene ciertos tópicos recurrentes en la obra del director como la confusión de identidades o un villano dotado de una malignidad maquiavélica, perfeccionista y racional.
Cine y danza
A veces el cine sirve para visibilizar la historia de ciertos artistas que en su época fueron importantes pero convivieron con los exponentes que marcaron la historia. Uno de estos personajes, que son muy conocidos por quienes cultivan un arte pero a veces no lo son fuera de esos círculos es Loie Füller, pionera de la danza contemporánea cuando brillaba Isadora Duncan.
La directora Stéphanie Di Giusto recorre su vida y obra en La danseuse, que es su ópera prima.