La Cámara de Diputados dio media sanción a la Ley de ESI, en línea con la legislación nacional, y giró el tema al Senado, donde el PJ presentó su propio proyecto.
La Cámara de Diputados de la provincia dio media sanción a la Ley de Educación Sexual Integral (ESI) que tiene como meta “regular el derecho de todos los niños, niñas, adolescentes y jóvenes de la provincia a una educación sexual integral laica, con perspectiva de derechos humanos, género y diversidades sexuales” en todos los establecimientos públicos, de gestión privada, cooperativa y social de territorio provincial, tal como establece la Ley Nacional 26.150.
El dictamen aprobado este jueves surge de la unificación de distintas iniciativas presentadas por las diputadas Gisel Mahmud (PS-Frente Progresista) y Agustina Donnet (Igualdad y Participación) y por el jefe del bloque del PJ Leandro Busatto (PJ).
La media sanción fue por amplia mayoría, pero no por unanimidad: votaron en contra del proyecto los bloques celestes Somos Vida (liderado por Amalia Granata) y Somos Vida y Familia (presidido por Nicolás Mayoraz) y los representantes del PRO Ximena Sola y Gabriel Chumpitaz. En los tres casos, se excusaron por “el contenido ideológico” del proyecto y cuestionaron que no se le da participación a las familias en la implementación de la ESI.
En 2006 se sancionó en nuestro país la ley N° 26.150, de Educación Sexual Integral (ESI). Dos años después se conformó en la provincia de Santa Fe el equipo interdisciplinario de ESI, cuyo rol es capacitar a la docencia santafesina en perspectiva de género y derechos, para contribuir desde las aulas a una sociedad igualitaria y sin discriminaciones. Más allá de la política pública, en las calles el movimiento local de mujeres y disidencias sexuales comenzó a reclamar un marco normativo que hiciera de aquella iniciativa una política de Estado. Hacia 2017 se registran los primeros proyectos de una ley que llegó a obtener media sanción -no sin presiones de los sectores conservadores- pero que finalmente el Senado evitó discutir.
Para consensuar el dictamen, los legisladores que integran la Comisión de Educación convocaron a organizaciones sociales, feministas, estudiantiles, religiosas y a especialistas a manifestarse sobre el tema. También participó la defensora provincial de Niñas, Niños y Adolescentes, Analía Colombo.
El proyecto toma como base el marco jurídico vigente de protección de los derechos de niños, niñas y adolescentes, con un paradigma que reconoce a las infancias y juventudes como sujetos de derecho y protagonistas del proceso educativo.
Si se sanciona la ley, la implementación de la ESI será obligatoria en todos los niveles educativos de la provincia, tanto los establecimientos públicos, de gestión estatal, privada, cooperativa y social. A través del Programa Provincial de Educación Sexual Integral, se diseñarán e implementarán las acciones de educación sexual basándose en la Constitución Nacional y en la normativa nacional vigente. También se impulsa una Dirección Provincial de Educación Sexual Integral, que será el órgano de aplicación de la ley.
Entre otros puntos, el proyecto manifiesta que la ESI deberá “garantizar el derecho a la construcción de subjetividades solidarias, a respetar y ser respetado en las creencias religiosas, pertenencias culturales, identidad de género y orientaciones sexuales”. Asimismo, se brindarán “contenidos tendientes a satisfacer las necesidades de desarrollo integral de las personas y la difusión y cumplimiento de los derechos sexuales reproductivos y no reproductivos, definidos como inalienables, inviolables e insustituibles de la condición humana”.
Ahora el proyecto con media sanción fue girado al Senado provincial, donde el bloque mayoritario del PJ presentó su propia iniciativa a través del representante del departamento Las Colonias, Rubén Pirola. Esta historia tiene final abierto.
