Poemas mínimos entre la nieve y el río

“Una temporada adentro” es el segundo libro de la poeta María Belén Sanchez, publicado por Hexágono Editoras.

Los poemas de Una temporada adentro (Hexágono Editoras), el segundo poemario de María Belén Sanchez, sugieren que siempre puede haber algo fantástico, oculto, entre lo cotidiano. El primer poema, que se llama Confusión, cierra con dos versos que atraviesan el libro: No puedo distinguir/ la distancia. La de Belén es una poesía con mucha naturaleza –taco de reina, caléndula, dientes de león, manzanilla, mar–, con imágenes de la inmensidad y momentos introspectivos que ponen en tensión esa percepción de la distancia.

El taco de reina aparece con otro de sus nombres, Capuchina. Todos los títulos están escritos con una sola palabra, y en los poemas hay una búsqueda por la brevedad y una construcción de imágenes, fruto de la observación o la imaginación poética, que no necesitan un remate o una reflexión final. Saco fotografías / con la mirada / y guardo / en mi memoria / el fulgor de los días, lo describe la misma Belén en un poema llamado Relicario.

¿Qué es afuera y qué adentro?

La capuchina, que ahora le da nombre a un poema, está presente en la tapa del primer libro de la autora, Costuras (Modesto Rimba, 2018). “Es una planta que tiene propiedades medicinales, se usaba en la antigüedad para curar y cicatrizar heridas. Creo en la medicina natural y en el poder de la naturaleza. Además es una planta que mi abuela tenía en su patio, todavía recuerdo la planta como una sábana naranja que cubría todo”, cuenta Belén. En el poema Deseo aparece esa imagen de la infancia: Y que me cubran con una sábana de enredadera.

También hay frío y hielo en el libro, que se cruzan con la flora litoraleña después de un viaje que la escritora realizó al sur. Allá vio los desprendimientos de los glaciares, una experiencia que después llevó a los poemas. “En ese viaje al sur registré el hielo, la fuerza pero también la fragilidad. A partir de esto me pregunto: ¿tuve que ver eso para escribir? ¿Tuve que viajar, moverme, salir de mí para ver lo que pasaba afuera? ¿Qué es afuera y qué es adentro? ¿Vivo separada o en comunión con la naturaleza?”, cuenta Belén.

Para alguien que vive entre ríos y una laguna, el mar es un misterio grandioso y excitante, pero puede ser demasiado ruidoso. Quizás por eso en el libro de Belén hay también mucho silencio, y una pregunta por lo que es propio, por lo que se lleva adentro. En mi vientre / guardo viento / olas del mar / y el color de las hojas / del último invierno, comienza un poema muy bello que se titula Decisión. Es una afirmación de la elección propia de con qué cargar y con qué no, qué parir y qué no.

En una de sus crónicas, a la escritora colombiana Margarita García Robayo alguien le dice “la naturaleza es sabia”. “La naturaleza mata gente”, responde ella. La gran poeta chilena Elvira Hernández, cuya obra nace de la contemplación del paisaje en reflexión con lo urbano, lo doméstico, el trabajo y la historia de los pueblos, tiene un poema que se llama Aves de paso: Eso somos. Pero nos hemos acostumbrado / a comportarnos como monumentos. / Y así nos va.

Los fragmentos de García Robayo y de Hernández se me vienen a la mente mientras leo los poemas de “Una temporada adentro”. Breves, impresos como pequeñas islas visuales en las hojas en blanco, abren un espacio para reconocer todo lo que no conocemos sobre lo que nos rodea y conectarnos con la percepción sensible de ese entorno, hacerla consciente. Para hacer un poco de silencio –guardarse una temporada– y poder encontrarse, sin ingenuidad, también con lo frágil y lo violento que puede haber en la naturaleza.

Un tiempo lento

Desde el título, es fácil pensar en el tiempo de encierro que implicaron las cuarentenas (ni falta hace ya nombrar al bicho). La relación entre escritura, lectura y pandemia fue un momento de bloqueo, de imposibilidad de entender para algunas personas, y un momento de mayor concentración para otras, como en el caso de Belén. Si bien el libro ya estaba en proceso antes de marzo del 2020, la pandemia le permitió “vivir un tiempo más lento, más pausado y poder conectarme con el deseo, pensar qué cosas son heredadas y qué cosas son propias. Situarme en otro lugar, mirar hacia atrás y en el presente tomar decisiones, ser honesta, habitar el vacío y hacer lugar para dar espacio a lo nuevo”, comparte. “Es un libro sobre las búsquedas y los hallazgos. Escribiendo mi libro fui escribiendo también el camino que me trajo donde estoy ahora”, afirma sobre el poemario.

La poeta nació en San Cristóbal en 1984. Es Profesora en Letras y estudió fotografía. Actualmente vive en la ciudad de Santa Fe, donde trabaja como docente en escuelas secundarias y coordina talleres de poesía y proyectos de formación artística donde las letras se amalgaman con las fotografías. Participó en diversas muestras fotográficas.

Textos suyos integran Otras nosotras mismas, una antología hecha en homenaje a Olga Orozco (Agua viva, 2020) y la antología Martes verdes Edición Federal (Poetas por el aborto legal, 2020), que incluye el poema Decisión.

Hexágono Editoras, el sello de “Una temporada adentro”, reúne a mujeres profesionales de la edición, la literatura y la comunicación, fundado por Sofía Di Noia y María Eugenia Riccheri. “Nos interesa la literatura que explora una cotidianidad atravesada por problemáticas actuales, que sea la voz de nuestra contemporaneidad”.

“Este deseo nos mueve a construir espacios de circulación, buscar autorxs nuevxs y, principalmente, correr riesgos”, afirma el equipo de trabajo.

Sobre el proceso de edición, Belén destaca “la mirada lúcida, sensible y el trabajo amoroso y cuidado que realizaron no solo con los textos sino también con el diseño del libro”. En línea con el minimalismo de los poemas, la tapa está diseñada con colores azules, blancos y plateados.

Dos poemas de María Belén Sanchez

 

Herbario

Tomo nota
observo el cuerpo
de las flores
registro su fragilidad
su espesura.
Hago un inventario
de las especies
y como en un testamento
dejo constancia
de mis posesiones:
todas las flores que vi
y toqué.

Nieve

Las estalactitas
como lanzas
en los días de invierno.
Camino debajo
de lo que puede herir.
Se trata de hacer silencio
y andar despacio.
Evitar que el filo
del hielo
atraviese.

El libro puede conseguirse en Del Otro Lado Libros (25 de mayo 2867) y en la Tienda de la Editorial Hexágono.

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