Federico Coutaz

“Noches alucinantes en que hasta las bestias duermen inquietas” Doña Bárbara Cecilio toma agua tibia. Pasa la noche en el río, pescando. Cecilio es chileno, llegó...

Lo que es un poco raro es ese aire criollo en sus rasgos, la sonrisa es ambigua, casi sobradora, en una mano tiene un...

En esta ciudad se cuenta, por ejemplo, que el loco Martoccia, y cuando digo loco, como se le dice, yo digo más bien poeta,...

Tres representantes de la asamblea de los habitantes permanentes del camping comunican al dueño que la reciente votación decidió casi por unanimidad la expulsión...

A Juan Carlos le gusta la lluvia, se sienta en el balcón a mirar la ciudad. Azucena no suspende su ejercicio por mal tiempo....

Seremos más extraños ahora que antes del comienzo. Mi Pequeña Muerte. Lucía está sentada tipo chinito frente a la carpa, el sol pica y el...

—¿¿¿La agarraste??? ¡¡¡Caete de orto, Roberto!!! ¡¡¡Caete de orto, Roberto Gamarra!!! —gritaba el Chiqui como vociferando un milagro. Acababa de tirarle al Flaco la...

—Al final ¿qué mierda dice ahí, Flaco? —pregunta el Chiqui con fingido fastidio. —No le preguntés más que se hace la estrellita mía el pajero...

No sé, fue como un cortocircuito y empecé a manotear el aire y a escuchar las clavas pegando en el asfalto, la última me...

“¿Alguna pregunta o comentario?” Repite el moderador y un ejército de hormigas invisibles sube por las patas de las sillas hasta las pantorrillas y...