Santiago Venturini
El jardín de la cerveza
Cuando era chico, salir a cenar a un restorán era todo un acontecimiento. Para mi familia, una de clase media venida un poco a...
Serafín
Tuve un rapto de misticismo ecológico y abracé un árbol. Fue mi momento natural de la semana. Lo rodeé con los brazos y apoyé la...
Conjeturas sobre Tita
El verano se está yendo otra vez, y aunque odiamos un poco su ferocidad, no queremos que se vaya. La gente lo despide sentándose...
Los muertos no tienen que preocuparse por los dientes, y menos...
Con una de mis paletas partidas –un incisivo frontal debería decir– salgo por París. Oh la la, soy la Chilindrina. Voy al odontólogo. El...
Concierto de piano
No sé por qué estoy sentado en un saloncito de la Casa Argentina en París, a punto de escuchar a una joven pianista. En...
Cosas de valor
Cuando murió, los hijos de Bill Standley, un ciudadano del estado de Ohio, cumplieron su voluntad: lo embalsamaron y lo metieron en un gran...
La luz
Un día de esta semana salí a la puerta de mi casa y vi la luz. Claro, pensé, ya es la época. Me paré...
Detalles
Entre las góndolas de un minimercado escucho el reclamo de una mujer. Se queja con el verdulero porque, asegura, le vendió verduras podridas a...
Charlas
A las nueve y media, el supermercado está lleno de gente que quiere volver a su casa con comida. Para la mayoría, el día...
Toda la sensación de un objeto de arte
Sigo pegado al padre. Aunque a esta altura mi propio padre se parece, para mí, a una pieza de museo. A mi edad, la...