A 29 días de las generales: volvió CFK, esta vez en forma de cárcel para hormigas

Por
Pausa
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"No hay que enojarse, no hay que criticarle a nadie el voto", tiró la vicepresidenta, mientras Milei cena con Barrionuevo y Bullrich promete construír un penal de máxima seguridad y ponerle el nombre de Cristina.

A lxs lectorxs: este será un resumen XXL porque condensará todo lo sucedido en las últimas dos jornadas. Esto habilita a mencionar, de paso, que estuvimos abocados a la magnífica experiencia del II Argentino de Periodismo y opinión pública que ha sido, realmente, una perla. Dicho esto, al lío.

Inútil es que nos hagamos los pánfilos: es obvio que lo que más interesa de las últimas 48 horas es que Cristina Fernández de Kirchner realizó un acto en el que habló, entre otras cosas, de la coyuntura electoral. Haremos lo que hace cualquier youtuber y medio de comunicación clickbaitero: dejar lo mejor para el final así ustedes están obligados a pasar mucho tiempo en esta web, dándoles caramelos al algoritmo.

Casi como si supieran que el sábado iba a estar prácticamente cooptado por la reaparición de Cristina, Milei y Bullrich hicieron lo imposible por mantenerse, al menos, dentro de la conversación. El candidato de La Libertad Avanza cerró la semana con un acto con BA RRIO NUE VO (lo escribimos así para que se entienda bien). Si, Luis Barrionuevo. Si, ese Barrionuevo. Y como eso no era suficiente, al acto concurrieron Facundo Moyano, Cavalieri y Medina. Y un tipo fue con el peor disfraz de león que hemos visto, y como fans de El Mago de Oz hemos visto muchos. Y para cerrar el mamarracho, Barrionuevo y compañía se sumaron a la cantinela de los jóvenes libertarios que bramaban ese nuevo clásico que es "tie ne miedo, la casta tiene miedo, la casta tiene miedo, la casta tiene mieeeeeee- e- e- do!".

Adjuntamos pruebas de las dos escenas previamente descriptas porque sinceramente son difíciles de entender así en seco.

Como para no meterse en un brete, Milei fue a lo seguro en el acto con sus nuevos socios y definió pegarle al tipo que hoy por hoy más se presta para que lo agarren de punto: the good old Horacio Rosatti.

¿Creerá Milei que el poder Judicial también forma parte de "la casta" o simplemente prefiere no meterse con ninguno de los poderes reales de este país? No lo sabemos. Habrá que ver. Como bien dijo la señora Bisman: "como sí o como no, porque hay mucha escuridad".

Cerramos el finde de los libertarios con un Ramiro Marra devenido en Duende Verde, en contra de los Peter Parkers de la vida.

La tierra de Pato Bullrich es, por estas horas, nuestra tierra: la candidata de Juntos por el Cambio se paseó por la provincia invencible en una jornada que la recibió con los brazos abiertos y la cámara lista para sacar una selfie histórica que logró juntar a Pullaro y Losada por primera vez desde aquella noche en la que Maximiliano se volvió gobernador.

Patricia lo está dando todo: hace tiktoks, insulta a vecinas, llama a los jóvenes a tomar alcohol, da declaraciones que no entiende nadie, y hoy hasta se subió a un caballo. Francamente no entendemos cómo es que algunas consultoras la ponen tercera (lejos) en la contienda electoral.

No se nos ocurre nada que interpele más a los votantes del PRO que ver a Pato sobre un equino empilchada completamente en ropitas cardón. Desde la recorrida de Carlos Saúl a caballo por Alto Verde que no se veía algo así.

Pero Pato nos tenía guardada su mejor jugada de la jornada para el momento en que CFK estuviera en vivo: en un nuevo spot, la candidata de JxC promete construir una cárcel de máxima seguridad (a lo Bukele), en una zona aislada (como si las cárceles se construyeran adentro de un shopping), para ponerle el nombre de "Dra. Cristina Fernández de Kirchner".

Muchas cosas para decir. La primera, ¿por qué la maqueta? Da la impresión de que es una magnífica cárcel para hormigas. La segunda, que el PRO tiene un fetiche con el nombre que se le pone a los edificios, y que dentro de esa lógica esto no es más que un homenaje. La tercera, que esto no le va a gustar a Sabsay, que sigue sosteniendo que Cristina nunca se recibió y que, por tanto, no es "doctora". Y la última, que nos suena que esto no es legal, pero como en esta campaña todo es medio borde vamos a decir "ya fue todo", y a seguir.

Ahora si. El plato fuerte.

Hay que decir que Cristina es, desde hace décadas, la mejor oradora de nuestro país. Esto genera un fenómeno que probablemente sea único en el mundo: hay tantos discursos de Cristina como intérpretes. Cristina no dice nada pero nos dice todo. Aquí, un combi-tuit a modo de síntesis.

¿El mejor? ¿El peor? ¿Las dos cosas y ninguna? No lo sabremos jamás. Lo único que se nos ocurre añadir a modo de análisis es que Cristina estuvo en modo docente, frente a un auditorio repleto de jóvenes. Quizás la lectura de la vicepresidenta es que ese fue siempre un núcleo que le resultó cercano, y que ahora en teoría (para algunas teorías, al menos) es el que está piantando sus votos hacia las tierras del Leónidas de las Pampas criado a insultos paternos y galletitas Bagley.

Acompañada por Pedro Rosemblat (el que antes era el cadete de Navarro pero ahora es el influencer sexy del pelo estilo mullet y las remeritas negras ajustadas que arma jingles con los amigos) CFK realizó una serie de analisis y comentarios sobre los últimos años de la economía del país que bien podrían ser un video de "Te lo resumo así no más" para mirar mientras almorzás. Elogió a Massa, se mofó de los que pedían que ella "hable antes", dejó algunas lecturas interesantes sobre la coyuntura actual y frente a la militancia, una vez terminada la clase, hizo una autocrítica interesante: reconoció que este gobierno (en el que se incluyó) defraudó a mucha gente.

El textual es: "Creo que nadie es libre si no sabe la verdad, nadie es libre si le dicen una cosa y es otra, nadie es libre si le venden gato por liebre. Y yo entiendo, entiendo porque hubo mucha ilusión, hubo mucha expectativa y no se pudo cumplir. Y yo quiero también en ese sentido pedirles perdón si no pudimos cumplir, pero créanme que lo intenté muchas veces, en cada momento lo dije. Y hay que meterle para adelante porque necesitamos que la sociedad argentina sepa cuál es realmente el problema que tiene nuestra economía".

Antes, en el auditorio, hizo referencia a lo absurda idea de que aspirar a una vida de comodidades es "de derecha".

En esa lógica, también remarcó que en la Argentina en qué vivimos no podemos (a su criterio) permitir el fenómeno de los "trabajadores pobres".

Nos dejó un blooper, también. Porque meme se nace, no se hace.

"No hay que enojarse, no hay que criticarle a nadie el voto", cerró, mandando a su militancia a buscar eso que el peronismo añora por estas horas: entrar derecho al ballotage, sin mayores dificultades.

HASTA ACÁ EL RESUMEN DE HOY AMIGUITOS. HACE CALOR, HAY MOSQUITOS, ES TIEMPO DE BIRRA, LA VIDA ES DIFÍCIL PERO LA SUPERAREMOS JUNTOS. O MORIREMOS EN EL INTENTO. ¡HASTA EL PRÓXIMO RESUMEN!

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