El secretario de Derechos Humanos de Santa Fe Emilio Jatón, participó junto a referentes del Foro Contra la Impunidad y por la Justicia y familiares de víctimas del terrorismo de Estado.
A 15 años del hallazgo de la fosa clandestina con restos de ocho desaparecidos en el Campo Militar San Pedro, el secretario de Derechos Humanos de Santa Fe, Emilio Jatón, participó de una jornada conmemorativa, reafirmando el compromiso de la Provincia con la memoria, verdad y justicia. Lo acompañaron Hugo Kofman, del Foro Contra la Impunidad y por la Justicia, y familiares de víctimas del terrorismo de Estado.
Campo San Pedro es un terreno de 2.100 hectáreas -800 de ellas de tierra firme- que fue expropiado por el Estado nacional en 1942 y cedido al Ejército Argentino. Entre 1976 y 1983, durante la última dictadura cívico-militar, se convirtió en un centro de exterminio y enterramientos clandestinos, formando parte del circuito represivo del terrorismo de Estado.
La actividad tuvo lugar en el predio ubicado en el distrito de Campo Andino, donde actualmente, con aportes del Gobierno santafesino, se llevan adelante tareas de exploración con georadares con el objetivo de detectar irregularidades en el subsuelo. “Hace tres meses comenzamos un trabajo técnico-científico, utilizando tecnología de punta para analizar qué ocurrió bajo tierra. En pocos días tendremos resultados sobre la casona del predio y, a partir de allí, evaluaremos extender el trabajo al resto del campo”, explicó Jatón, y agregó que "el trabajo se realiza en coordinación con los organismos de Derechos Humanos”.

Desde la denuncia judicial presentada en 2007, el gobierno de Santa Fe ha tenido un rol activo en las investigaciones y en el señalamiento del sitio como espacio de memoria. “Con estas acciones articuladas con los organismos de Derechos Humanos, desde la Provincia reivindicamos nuestro compromiso con la Memoria por la Verdad y la Justicia”, enfatizó Jatón, para luego indicar que “en este espacio realizamos tareas permanentes para su mantenimiento. Además, trabajamos en su señalización, acondicionamiento y ahora también estamos incorporando nueva tecnología para profundizar las búsquedas”.
“Valoramos la decisión de la Secretaría de Derechos Humanos de la Provincia de continuar con una política firme", expresó al respecto Hugo Kofman. "Trabajamos con voluntarios, muchos de ellos jóvenes de Laguna Paiva, y eso nos llena de esperanza”, añadió.
Por su parte, Liliana Salinas, hermana de María Isabel, una de las personas cuyos restos fueron hallados en el lugar, subrayó el valor de las acciones que se llevan adelante para “recordar y mantener viva la memoria de mi hermana, que desapareció en 1977": "Mi madre murió sin saber nada, siempre la esperó. Recuperar su cuerpo y su memoria me reconfortó profundamente. Mari era sencilla, muy inteligente. Éramos pobres, y fue la primera de la familia en ir a la facultad. Trabajó en los barrios, en San Lorenzo, haciendo apoyo escolar, luchando por quienes menos tenían. Eso era mi hermana”.
El hallazgo
La búsqueda comenzó en 2006 con una investigación impulsada por organismos de derechos humanos. En 2007 se presentó una denuncia judicial y, en junio de 2010, el Equipo Argentino de Antropología Forense localizó una fosa clandestina en la zona, donde fueron hallados los restos de ocho personas desaparecidas en Rosario durante 1977.
Las autopsias revelaron que siete de los cuerpos presentaban impactos de bala, algunos con proyectiles de pistola 9 mm. alojados en los cráneos. Estaban desnudos, arrojados en la fosa y cubiertos con cal. Hasta el momento, se han identificado los restos de María Esther Ravelo, Gustavo Pon, Carlos Bosso, María Isabel Salinas, Oscar Winkelman y Miguel Ángel D’Andrea. Dos cuerpos aún no pudieron ser identificados por falta de registros genéticos.
Se cumplen diez años del hallazgo de los restos de ocho desaparecidos en el Campo Militar San Pedro








