Las mascotas de Centeno I

Hubo antes por lo menos un gato, mi abuela contaba como anécdota que una vez habían salido con mi abuelo al cine, y al...

Escribo tu nombre

1.- Cuando tenía 12 años, quería tener 15. Luego, quería tener 18. Recién a los 20 me fui de mi casa. Me fui, libre...

Sátiros

El barrio en el que crecí empezó a formarse unos años antes de que yo naciera, a fines de los 70. Al principio, a...

Llamadas telefónicas

El día en que instalaron un teléfono fijo en mi casa, todos nos quedamos mirándolo como si un ovni hubiera aterrizado en el living....

A dos aguas: Verde flúo

Por Fernando Callero El calor era durísimo, estábamos en noviembre de 1992. El pekinés de la madre de mi amigo ladró como una castañuela mientras nos...

Uarini

Uarini es un pueblito perdido en la Amazonia brasilera. Se pronuncia acentuándolo en la “i” final, uariní. Queda a tres horas de lancha rápida...

Baltazar y Sánchez

Baltazar era todo negro y el pelo le brillaba. No fue fácil que me dejaran tener un perro, me lo trajo Germán de Colastiné....

Morbositos

El otro día murió una vecina que vivía enfrente de mi casa. Casi no la conocía. Sabía que se llamaba Marta, porque un domingo...

Las pérdidas

A Analía G. Hoy vi llorar a una mujer como si fuera una nena. Se tapaba la cara; el dolor, pero también cierta vergüenza por...

Costanera

Si vos sos un pibito de la laguna, decía alguien que no recuerdo a no sé quién, en Guadalupe, si no me equivoco; tampoco...