Radiografía del gabinete de Macri: de acuerdo a un estudio de la Universidad Nacional de San Martín, en el equipo del presidente la mayoría son hombres, porteños y con título de abogado o contador. Sólo el 22% de puestos jerárquicos es ocupado por mujeres y más del 30% proviene de las empresas privadas.

La Universidad Nacional de San Martín (UNSAM) publicó un informe titulado “Perfil sociológico de los miembros del gabinete inicial del presidente Mauricio Macri”.El trabajo analiza la trayectoria y formación de las 364 personas que fueron designadas para ocupar las posiciones más importantes del gabinete nacional en diciembre de 2015.

Hombres empresarios

Entre sus datos más salientes, el informe revela que el 31% de los funcionarios (114 de 364) ocupó alguna vez un puesto de alta o media gerencia en el ámbito privado. Además, un 11% proviene de corporaciones empresarias como la Sociedad Rural Argentina, Confederaciones Rurales Argentinas o la Unión Industrial Argentina.

Además, el gabinete de Cambiemos es predominantemente masculino. Sólo el 22% del total de los altos puestos jerárquicos es ocupado por mujeres. Además, sise considera el tipo de cargo que tienen, se identifica un “techo de cristal”: la mayoría de ellas ocupa los cargos más bajos. De 83 mujeres, 55 (66,2%) se desempeñan como subsecretarias, mientras que sólo 3 tienen cargo de ministro: Carolina Stanley, en Desarrollo Social, Patricia Bullrich, en Seguridad, y la canciller Susana Malcorra.

Poco federalismo

Al analizar el lugar de procedencia de estos altos funcionarios, se encuentra que se trata de un gabinete metropolitano y poco federal. La mayoría son porteños y varios de ellos (el 28%) trabajó anteriormente en el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, cuna del macrismo.

Vale decir que este “transplante” directo de equipos de la ciudad a la Nación se orientó  hacia algunas carteras puntuales: Desarrollo Social, Modernización, Secretarías presidencial, Jefatura de Ministros, Interior y Educación. Es decir que las carteras más “porteñizadas” son las del “área política” del gabinete.

Universitarios

Los funcionarios jerárquicos del gabinete presentan un elevado nivel educativo: el 75% posee un título universitario, y el 42% posee, además, algún posgrado.

En términos generales, las disciplinas en las que se formaron estos funcionarios son las consideradas como “tradicionales”: el 78% se formó en ciencias económicas, derecho o alguna ingeniería.

Un dato llamativo es que la mayoría de los funcionarios del gabinete fueron a instituciones educativas privadas: el 33% para el caso del título universitario y el 70% entre quienes tienen posgrado.

Escasa participación en partidos políticos

Del total de los altos funcionarios del gabinete, sólo 63 (17%) poseen participación partidaria comprobada (53 de ellos están afiliados a algún partido). En este reducido grupo, los funcionarios del PRO representan el 68%, seguidos por un 24% de la Unión Cívica Radical, y una presencia mínima de funcionarios de fuerzas políticas, como el Partido Justicialista o la Unión de Centro Democrático.

Sin embargo, más de la mitad del gabinete inicial (54,5%) participó en ONG o instituciones culturales, académicas, profesionales o religiosas. Dentro de los que participaron en este tipo de organizaciones, el 28% lo hizo en fundaciones ligadas al PRO: Pensar (34 casos), Grupo Sophia (7) y/o Creer y Crecer (5).

Conclusiones

Luego del análisis de los ministros, el informe llega a interesantes conclusiones. Afirman que, “más allá de las apreciaciones a favor o en contra de la incorporación de CEOs en el gabinete, lo cierto es que esto nos habla de una particular forma de articulación entre elite económica y elite política en la Argentina”.

Los investigadores plantean que no es un hecho novedoso que haya gerentes de empresas en el gobierno, ya que en varios momentos de nuestra historia hubo empresarios o integrando gabinetes nacionales. Lo que sí es novedoso es el protagonismo e influencia que tienen actualmente. “Por la magnitud, extensión y visibilidad de su presencia en estas altas dependencias del Gobierno y del Estado, y porque desbordaron el ‘área económica’ y colonizaron el ‘área política’ del gabinete, transformándose así en actores decisivos en la toma de decisiones”.

Finalmente, el estudio enumera algunos de los riesgos de conformar un gabinete “empresarial”: tienen un sesgo antiestatal y promercado que impregna la ideología de gobierno; aumenta la probabilidad de conflictos de intereses y la posibilidad de ceder ante presiones de actores económicos; y el traslado de criterios del management a la administración pública.

Datos del informe

La investigación fue coordinada por las sociólogas Ana Castellani y Paula Canelo.

El trabajo de campo fue realizado entre febrero y septiembre de 2016 por un equipo integrado por 25 investigadores y becarios del CONICET y la UNSAM.

Se recurrió distintas fuentes de carácter público: el Boletín Oficial, diarios y revistas, currículum vitae y fichas biográficas de los funcionarios publicadas en las páginas web de los ministerios, presentaciones de los funcionarios en eventos académicos, publicaciones oficiales, etc.

Observatorio de las Elites Argentinas

El Observatorio de las Elites Argentinas forma parte del Programa de Estudios sobre las Elites Argentinas dela UNSAM. Desde su conformación en 2012, se dedica a analizar el perfil sociológico y los vínculos de las elites económicas, técnicas y políticas en la Argentina contemporánea.

El Observatorio busca acercar al público general, análisis rigurosos y actualizados sobre la configuración de las elites argentinas.

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