¿Por qué está bien que el Estado te enseñe a drogarte?

Un folletín del Municipio de Morón informando sobre el uso de drogas desde una óptica de la reducción de daños, despertó la indignación conservadora de principios de semana. Repasamos el debate y sentamos postura sobre un tópico del que ya hablamos.

"La mayoría de las instituciones sociales que nos rodean y habitamos tienen una reacción sorda ante el consumo de drogas", decíamos en esta nota de 2018 publicada en Pausa.

La solución pareciera ser —en el mejor de los casos— no hablar: tanto en escuelas como en la familia es probable que el tema se limite a la prohibición. Es un tabú.

El problema es cuando todo ese miedo se condensa en un discurso político reaccionario, por lo general transversal a todo partido político, que viene siendo programático para un amplio abanico de derechas.

En lo que a esta nota respecta, tal forma discursiva puede resumirse en la indignación desbocada de Diego Santilli:

La reacción fue provocada por una publicación en la cuenta de Instagram de la Dirección de Políticas para Juventudes de Morón, quienes pusieron en historias: “Cocaína, pastillas, tomá poquito para ver cómo reacciona tu cuerpo”, entre otras sugerencias.

El flyer dice: “Si vas a consumir, acordate de estos consejos”, y entre las recomendaciones indica: “Porro, conseguilo de fuentes confiables”, la palabra “prensado” tachada, y luego: “Mejor flores”.

Curiosa fue la respuesta que tuvo Santilli por parte de El Gato y La Caja (autores del genial libro que inspira este artículo), quienes avisaron al legislador nacional acerca del "mail sobre drogas y reducción de daños (enviado) desde hace dos semanas".

"(El uso de drogas) es un tema sobre el que queremos conversar con tomadores de decisiones para que tengan la mejor evidencia disponible", agregaron en su respuesta.

Asimismo, el Municipio de Morón hizo un descargo en el que planteó: “En relación al contenido de un material con recomendaciones para las y los jóvenes, distribuido en el día de ayer por la Dirección de Juventudes, el Municipio de Morón informa que los mensajes allí incluidos se enmarcan en el Programa de Reducción de Riesgos y Daños asociados al consumo de sustancias psicoactivas legales e ilegales, que lleva adelante la comuna."

Es que por más de que exista una prohibición sobre las drogas ilegales, como en la actualidad, lo concreto es que cada vez más personas de este mundo las consumen y lo seguirán haciendo, y es una discusión que se debe dar.

El paradigma prohibicionista es una utopía que ha causado más muertes que resultados positivos para la sociedad.

En cambio el modelo de reducción de riesgos y daños, en el ámbito de las drogas, entiende que el fenómeno del consumo es complejo, multifacético y que es parte de nuestra realidad. Propone minimizar los riesgos y los daños asociados al consumo, en lugar de ignorarlos o perseguir a los consumidores, sin que esto implique restarle importancia al real peligro asociado al uso de drogas.

Sobre la cocaína

La forma más conocida del uso de la sustancia probablemente sea el polvo blanco que se aspira por la nariz o se inyecta por las venas, llamado clorhidrato de cocaína. Otra forma muy conocida de tipo de cocaína es la pasta base, crack o paco. A diferencia de las anteriores, se fuma.

La cocaína puede dañar y hasta producir la muerte de una persona sana sin historial de consumo previo. El motivo es que la cocaína aumenta la presión arterial, la temperatura corporal, produce deshidratación y estrecha los vasos sanguíneos, por lo que grandes dosis pueden causar infartos de corazón, accidentes cerebrovasculares, falla orgánica, convulsiones y muerte.

Un factor que aumenta el riesgo de daños y muerte es el consumo de alcohol junto con el de cocaína, ya que su interacción desprende un compuesto químico llamado “cocaetileno” que tiene gran toxicidad para el corazón, potenciando así los efectos nocivos de la droga en ese órgano. Además, la cocaína es una sustancia que presenta un riesgo de adicción bastante grande; el riesgo de adicción es más fuerte en la pasta base.

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