"Teatro Bar, la tercera en discordia", una propuesta que enseña a divertirse

la tercera en discordia

Variados son los temas que confluyen sobre la corriente de opinión para encrespar las aguas de la realidad nacional. Casi todos tienen estrecha vinculación con la endeble marcha de la economía, que surge entonces como la gran condicionante de la paz política en nuestro país. Además, ninguno de los sectores de la comunidad escapa en estos momentos a los efectos desgastantes de la recesión económica. Los núcleos activos y la clase pasiva de todos los niveles soportan por estos días la tensión provocada por un estado de incertidumbre que va mucho más allá de la elevación del costo de vida (una vergüenza cotidiana) para colocarse en la angustia de no saber qué puede ocurrir en plazos inmediatos.

Es por todo lo anterior que resulta gratificante ir los sábados a Estudio Barnó. La sala ha sido convenientemente acomodada para permitir el uso de un pequeño escenario y la misma sala después. Pero porqué invitamos a Barnó. Durante más de una hora la fiesta está asegurada. Eduardo Córdoba, Eduardo Leva, Franco Ceci, Larisa Sánchez y esencialmente Mariano Franco, todos integrantes del Grupo Amalgama, la rompen para lograr lo más importante e indiscutible: que el espectador y la espectadora se rían, y lo pasen muy bien. Conviene recordar que se comen exquisiteces y se toman tragos de su preferencia.

“La tercera en discordia” reúne teatro, danza y fonomímica, su base primordial. Épocas pretéritas son convocadas, pero tampoco importan demasiado. Una vieja radio es el vehiculo importante para que las secuencias vayan contando su historia. Desde la dirección del espectáculo Eduardo Córdoba trabajó con sensible inspiración y logró una totalidad que el público celebra con su participación y el aplauso final. Lamentablemente no se entregaron programa de mano para saber quiénes son los autores/as del muy buen maquillaje y del vestuario.

Para ser más justos todavía hay que destacar el trabajo de los intérpretes, ya que pueden expresar el carácter trágico de alguna secuencia, y ciertos rasgos grotescos y el carácter melodramático de la totalidad. Lo más importante es que todos juegan el juego de la representación, y se mueven muy cómodos en sus roles. El espectáculo permite advertir que nada queda en la superficie y demuestra cómo la riqueza de lo arquetípico reside, como en cualquier arte narrativo, en los niveles que subyacen bajo so condición emblemática.

 

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La última función de "Teatro bar, la tercera en discordia" es este sábado 10 de febrero a las 21. Por consultas y compra de entradas, comunicarse al 3426109467.

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