El Foro contra la Impunidad y por la Justicia de Santa Fe repudió un caso de "detención arbitraria y extrema crueldad" que incluyó golpes, un encierro de más de 10 horas sin tomar agua ni ir al baño y el robo de una tarjeta de crédito.

El Foro contra la Impunidad y por Justicia de Santa Fe expresó su repudio contra "la detención arbitraria y la extrema crueldad" ejercido por la Policía contra dos personas el pasado 13 de diciembre. El episodio, que ya fue denunciado en Asuntos Internos, incluyó golpes y un encierro injustificado que se extendió por más de diez horas, sin siquiera brindar agua ni permitir ir al baño a las víctimas.

El hecho involucró a una mujer, que es docente, y un amigo suyo, que la acompañaba, quienes circulaban en un vehículo a las 3 de la mañana por el centro. A raíz de una situación de tránsito con otro vehículo, que no provocó ningún daño material, el otro conductor "insultó a la docente, la amenazó con meterla presa" y llamó a la Policía. Acto seguido, llegaron al lugar dos patrulleros y dos motos, "que esposaron por detrás y se llevaron detenidas a las dos personas, a quienes en ese momento no se las acusó de cometer ningún delito".

"La mujer detenida fue llevada en un móvil policial por una mujer policía, que la arrojó sóla en la parte posterior del mismo y la trasladó a gran velocidad por la ciudad, realizando virajes y frenadas bruscas que la hicieron golpear contra distintas partes del vehículo, ya que estando esposada estaba imposibilitada de protegerse", continúa el comunicado del Foro.

"Luego de pasar por la Comisaría 1º fue conducida a la 2º, donde fue alojada en una celda, sin sus pertenencias, lugar que estaba orinado y no contaba con nada donde sentarse", sigue la denuncia. La mujer pidió que le facilitaran una silla, ya que por un problema congénito de columna no podía estar de pie, frente a lo cual "le acercan la silla pero se la dejan con expreso maltrato del otro lado de la reja, por lo que tuvo que sentarse en ese piso infecto".

La mujer permaneció en la celda hasta pasadas las 14, "tiempo en el cual solicitó que le dieran agua y también que la condujeran al baño, lo cual le fue negado en varias oportunidades". "Tampoco se le permitió hacer la llamada de contacto con su familia, de modo que durante más de diez horas no pudieron saber dónde y cómo se encontraba", agregaron desde el Foro.

Luego de ser liberada, la mujer pudo constatar que su amigo había sido golpeado y herido en la zona del ojo derecho, y se les informó que serían acusados falazmente de “resistencia a la autoridad”.

Frente a esta situación, la víctima realizó la denuncia en Asuntos Internos, dando también intervención a la Fiscalía de Delitos Complejos. "En esa dependencia le informaron que ese tipo de denuncias actualmente eran 'moneda corriente'", señala el texto.

Por si todo esto fuera poco, en días posteriores las víctimas advirtieron que no se les había devuelto "una tarjeta de crédito dentro de los elementos que la policía había retenido", y que la misma había sido sido usada "para compras de alto valor, lo que motivó una nueva denuncia por el accionar policial".

"Reclamamos al MPA la investigación y acusación con celeridad y compromiso para que sean sancionadas las personas responsables de estos ataques y cese la inaceptable habitualidad de los mismos", concluye el comunicado del Foro.