Coliseo cultural

Medios | Un estudio completamente nuevo, y un potente streaming, los nuevos logros de la FM Ochava Roma. 

Ochava Roma es un arma de doble filo en contra del uso mercantil de la cultura: talleres, espectáculos, muestras de todo tipo en su faceta de centro cultural; programas de radio FM y streaming al servicio de la agenda de los barrios, de los excluidos, de los otros que siempre quedan afuera. Cuarta temporada del bastión romano del arte under.

Para el oeste de Avenida Freyre Santa Fe es más santafesina: árboles altos, talleres mecánicos y una rama de burrito desbordando un tapial, veredas anchas y esquinas más largas. Ir por el Parque Garay o pasar por la puerta de Newell’s, Mendoza al 4000, está más bueno que verlo por televisión, leerlo en los diarios o escucharlo por algunas radios.

Una de esas esquinas, de las que en los barrios troca calle por pasaje, ofreció hacer de su casa un espacio para pelear no contra la mala fama de barrio Roma, sino que la cosa es directamente contra la mala prensa que desde espacios donde priman las agendas hegemónicas construyen vecindarios como nichos que hierven de delincuentes.

Frecuencia escuchada

Gracias a los alcances de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, este espacio pasó de nuclear familias domésticas a una sola: la que abraza la causa del trabajo y el arte independiente, local, autogestivo. Ahí donde Magallanes (Catamarca o Eva Perón, al este de la avenida) hiere a Santiago de Chile, la arteria sangra una radio comunitaria con un centro cultural pegado en la frente que se llaman, en conjunto, Ochava Roma. “2016” significa la cuarta temporada al aire de la FM 107.1, dial que le asignó la cascoteada Afsca.

 

Juan Vergara pone a punto el estudio de Ochava Roma.
Juan Vergara pone a punto el estudio de Ochava Roma.

El espíritu musical de la FM se hace patente a partir de programación constante de exquisita música no comercial seleccionada de todas partes del planeta aunque con preponderancia local, tarea de Abelardo Gúrpide. Se le suman a ella más de 20 programas propios que tocan tantas zonas de la sociedad como puedan enumerarse: estudiantes secundarios, de comunicación social y universitarios, otros varios voluntarios, parroquianos, artistas, personal de salud, y sigue… incluso se hacen programas en coordinación con extensión de la UNL y hasta con Radio Utopía, una comunitaria de Madrid que dedica semanalmente un segmento de rock santafesino a través de uno de sus programas: “Rock al poder”.

Más allá de Roma

Asimismo, varias comunidades se hicieron cargo de paliar la necesidad de un espacio en el que el mensaje de las personas en perjuicio del de “los medios” fuera el verdadero protagonista del hecho comunicativo y del cultural, como dice Claudia Chamudis, co-fundadora de la Ochava. En “La Zonal”, por caso, psicólogos que trabajan en centros de salud del oeste informan, debaten y alargan sus actividades con jóvenes de esos barrios vulnerados y vulnerables. Desde allá, desde el norte, el centro y la costa también se acercan a hablar por los micrófonos de la Ochava. Y a proponer y organizar eventos: conciertos sin filtro de género, muestras y talleres de teatro, fotografía, de guitarra, eventos como el Festival de Literatura de Santa Fe, jams de poesía y hasta de cine. Toda propuesta es bienvenida en tanto y en cuanto no interfiera en lo ya programado. El trabajo se planifica y ejecuta de manera horizontal, junto con Claudia y Juan (el co-fundador restante) permanentemente detrás de los detalles y las urgencias edilicias o eventuales, como ayudar a armar el escenario, instalar los equipos de audio, monitorear el aire y las transmisiones en vivo de cada acontecimiento celebrado, que además del aire se transmite en vivo vía streaming para a cualquier lugar del mundo con Internet.

Radio al hombro

No es raro pasar por la esquina de Santiago de Chile al 2600, ver una puerta abierta y a un hombre con movimientos cansinos y actitud persistente ensamblando alguna estructura, cargando un panel, revisando una de sus cajas de herramientas a través de sus lentes ovalados. Ese hombre es Juan Vergara, el hombre que persigue el cuidado de las cosas pequeñas así como de las más macro para que Ochava Roma vaya siempre para adelante, convidando el lugar a partir de valores generales que van en sintonía con el espíritu de su contexto e historia.

Para esta temporada Ochava inauguró un estudio nuevo, dejando atrás la vieja pieza que ya encantaba a propios y extraños (y que se mantiene como laboratorio de audio) para agregar cámaras y mejorar la transmisión de video a través de la página web www.ochavaroma.org, logrando así más lugar para recibir a los invitados y sus performances y equipamiento nuevo en general: “la verdad es que tuvimos que juntar lo poco que habíamos cobrado de varios concursos porque, a pesar de haber ganado varias convocatorias de Afsca, los últimos meses fueron difíciles en lo que a seguir percibiendo beneficios desde el Estado respecta”, advierten.

Cada vez hay más gente engordando las filas de la trinchera de barrio Roma, haciendo más ligero cada inconveniente, acercando su proyecto para formar parte, para aportar su fuerza. Los micrófonos siempre están abiertos, el escenario, disponible.

Publicada en Pausa #169, jueves 31 de marzo de 2016

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