Violento allanamiento de la Federal en la Universidad de Comahue

    La Policía Federal ingresó a un conjunto de residencias estudiantiles la Universidad Nacional del Comahue (UNC) y protagonizó tétricas escenas de violencia y abuso. Rompieron el lugar y los bienes de los estudiantes, esposaron a algunos e impidieron que se vistiera una joven que se encontraba en la ducha.

    Un allanamiento irregular por drogas –tenencia de algunas plantas de cannabis y un poco de porro– terminó con una serie de escenas dantescas de abuso policial sobre los estudiantes que habitan en las residencias de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UNC. El sábado 9 de diciembre a las 20.30 efectivos de Policía Federal irrumpieron en el predio de la ciudad de Roca, Río Negro, con apenas una "orden de allanamiento firmada por el secretario del juez federal Greca y no por el juez a cargo, como lo exige la ley”, denunciaron desde el Centro de Estudiantes.

    Por su parte, el decano de la Facultad, Andrés Ponce de León, coincidió con los estudiantes: "la orden de allanamiento exhibida por la Policía Federal no llevaba firma de juez federal alguno, lo que coloca al ingreso de la fuerza federal en una palmaría ilegalidad, puesto que viola el artículo 31 de la Ley de Educación Superior”, repudió en un comunicado, que además estima que "de manera contraria a los principios de razonabilidad y proporcionalidad que deben regir todo acto estatal, el allanamiento se desarrolló con una violencia y despliegue policial inusitado, que trajo como consecuencia innecesarios daños al patrimonio".

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    En consonancia con las denuncias de los estudiantes, el decano de la casa de altos estudios estimó que "es mucho más grave la comisión de diversas vejaciones a los derechos y garantías constitucionales de los estudiantes de las Residencias, lo que se agravó por la insólita negativa de los funcionarios policiales de permitir el ingreso de abogados, que además resultan ser docentes de nuestra casa de estudios”.

    Pero pasó mucho más que esto. La escena es terrorífica, los estudiantes la detallan con una contundente enumeración: "No golpearon la puerta ni esperaron a que alguien atendiera. Ingresaron violentamente rompiendo puertas y cerraduras. Esposaron, tiraron al piso y se burlaron de los y las compañeras de las residencias. Una de ellas se encontraba en el baño duchándose y la policía ingresó de forma violenta y revisó la residencia sin permitirle vestirse. Mantuvieron en todo momento a los y las estudiantes incomunicadas".

    Diario Río Negro publicó fotos de cómo quedó el lugar y consignó que los organismos de Derechos Humanos de la región ya levantaron su repudio,  como el Observatorio de Derechos Humanos de Río Negro. También el gremio docente rionegrino, UNTER, expresó su rechazo a lo sucedido. Con contudencia, ATE y CTA Río Negro señalaron que “Lo que ocurrió es gravísimo. Esto solo pasó en nuestro país durante los regímenes militares. No existió orden judicial válida, ni autorización de las autoridades universitarias. Enfrentamos una pérdida sistemática de las garantías constitucionales y el Estado de Derecho se reduce a una mínima expresión”. El secretario general de la organización, Rodolfo Aguiar, se presentó minutos después de iniciado el operativo en las residencias.

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