La Guardia de Infantería reprimió con balas de goma a 80 personas que se disponían a hacer un paro por mejoras en las condiciones laborales y aumento de salarios. El ataque se produjo sobre los trabajadores de la planta de gas Ingenio Ledesma, en la localidad jujeña de Libertador San Martín.
Las fuerzas policiales, no conformes con ello, bloquearon durante una hora el ingreso de la asistencia médica para los heridos, entre los que hubo también cuatro policías que recibieron piedrazos. El operativo represivo tuvo como autores ideológicos a los mismos propietarios de la empresa (la familia Blaquier), implicados en episodios durante la última dictadura como el Apagón de Ledesma, cuando entregaron 400 empleados a los represores. La seguridad privada de la empresa contribuyó con la violencia.
#URGENTE Reprimieron a azucareros de SOEAIL Ledesma #Jujuy en marco de paro x tiempo indeterminado pic.twitter.com/vA29cezXDD
— Agencia CTA (@agenciaCTA) 14 de julio de 2016
Tras la represión, Rafael Vargas, secretario general del Sindicato de obreros y empleados del Ledesma (Soeail), dijo a Télam: "Tenemos unos 80 compañeros que han quedado adentro de la planta, detrás del cordón policial, casi todos con impactos de balas de goma disparados a quemarropa por la Guardia Infantería".
En El Ancasti
En Página/12
