En marzo de 2011, después de que el Senado le diera rango de ley a fines de 2010, publicábamos en Pausa que el nuevo sistema de votación iba a generar “ensaladas”. Decíamos, en el resumen de la nota: “El candidato a gobernador de una lista, la lista a diputados de otra. El intendente, de una tercera. La boleta única y la capacidad del Senado para ver abajo del agua”. Aludíamos en la última oración a que los más beneficiados por la Boleta eran nuestros landlords, dueños del reconocimiento en sus departamentos, que perdían todo compromiso al alza o la baja al no quedar más pegados a otros candidatos en una boleta sábana.
En 2019 se tradujo en su máxima expresión esa advertencia. El gobernador es peronista, la mayoría de la Cámara Baja es socialista. Los intendentes de la mayoría de las principales ciudades también lo son: en orden, Rosario, Santa Fe, Venado Tuerto, Villa Gobernador Gálvez y Santo Tomé. Entre las grandes, la tercera ciudad (Rafaela) y la séptima (Reconquista) son del peronismo. Mientras, 16 de los 19 senadores renovaron sus bancas. Más que ver abajo el agua, los senadores fuman.
No hubo tracción ni empuje que valga. La lista de diputados del peronismo obtuvo el 17,59% en la provincia, Omar Perotti el 40,52%. En la ciudad, el gobernador electo sumó el 38,11%, mientras que su candidato a intendente alcanzó 16,84%. A la inversa, el intendente electo llegó al 47,64% y su candidato a gobernador al 35,89%. Las distancias son abismales y muestran el quiebre estructural de la solidaridad entre los candidatos. No importa cuánto lo intenten los partidos y cuánto apuesten los marketineros a pegar la imagen de uno a la de otro: el corte de boleta es estructural.
Quienes primero aprovecharon las características intrínsecas de la Boleta Única fueron los macristas. Es un error creer que no tuvieron éxito. Un partido formado por residuos del reutemanismo y jóvenes de country estuvo dos veces a nada de llevarse la Casa Gris gracias a poner un Midachi a la cabeza. En 2019, el recurso fue explotado a fondo: el socialismo en nuestra ciudad tiene a Emilio Jatón y en Rosario a la conductora de TV Susana Rueda ganadora del Concejo, los celestes tienen a Amalia Granata y cinco diputados más en la Legislatura, con un tercer puesto poderosísimo, y el peronismo ganó las senadurías de La Capital y Rosario con el cantante Marcos Castelló y el periodista deportivo Marcelo Lewandowski.
El resultado final de este experimento electoral es que todes van a tener que negociar con todes. La Boleta Única abrió las puertas para lo que serán cuatro años de política en niveles nunca vistos de pura rosca.
