A dos aguas: Dos planetas azules

Por Fernando Callero La primera vez que vi un vaso correr boca abajo por la mesada me pegué flor de susto. Mi vieja me explicó que...

A dos aguas: Sarro

Por Fernando Callero Finales de 1993. Vivíamos en la planta baja de una casona frente a la Legislatura. Tenía 21 años y pronto iba a...

Si sabés algo, calláte

Por Federico Coutaz Con esa frase fui recibido. Un amigo se hizo parroquiano de un club de bochas. Lo acompañé una noche, y me sorprendió...

Save to the Bullying

Por Federico Coutaz No hace mucho, conocí el término bullying. Poco después, noté que era la palabra preferida de algunos docentes. Luego supe que el...

A dos aguas: Verde flúo

Por Fernando Callero El calor era durísimo, estábamos en noviembre de 1992. El pekinés de la madre de mi amigo ladró como una castañuela mientras nos...

A dos aguas: El Vado

Por Fernando Callero En enero de 1990 llegué con mi familia a Santa Fe en un camión de mudanza. Toda mi casa de Concordia trasplantada...

Yo pienso de que

Por Federico Coutaz I Los programas radiales de fútbol sirven para pensar. Hace poco escuché decir en uno que “de los seis partidos del grupo, cuatro...

Por el poder de Facebook

Por Federico Coutaz Me intrigan mucho las publicaciones que describen situaciones como “tomando mate con tal”, “qué frío”, “estudiando” y así… Sospecho que la lucha por...

La casa de mi período oscuro

Unas palabras del escritor en un encuentro de jóvenes secundarios. Por Francisco Bitar (A Julián Bejarano y Fernando Callero) En el año 2004 yo tenía 23 y...

El margen y la vanguardia

No lo Soporto y Diamantina: los números centrales de la primera fecha del año de Suena Rizoma. El boca a boca ha muerto, pero vive en...