Nuestro país registra 1150 víctimas de coronavirus por millón de habitantes, una cifra que está lejos de los que peor llevaron la pandemia, también de los que hicieron mejor las cosas. Entre los más afectados, Perú, Brasil, Estados Unidos, Bélgica y el Reino Unido. Los que llevaron medidas más estrictas tuvieron muchas menos muertes.
Argentina tuvo dos olas fuertes de contagios de Covid 19, una cerca de septiembre y otra después de las fiestas. Si bien la expansión de virus no volvió todavía a las cifras de mayo, cuando se pudo haber aplastado la pandemia, hoy nuestro país dista mucho de estar en el lote de los más afectados, en comparación con naciones de América y Europa. A la inversa, los países de Asia, sobre todo hacia el Pacífico, tuvieron resultados mucho mejores.
La diferencia estuvo entre la laxitud o la rigidez de las normas de cuidado. Argentina no fue en absoluto de los países con cuarentenas más estrictas y, menos que menos, de las naciones que tuvieron sistemas de hipercontrol digital de ingresos, egresos y circulación de la población. Las naciones que sí implementaron cuarentenas más duras y vigilancia extrema hoy muestran cifras de muertes por millón de habitantes como las que Argentina tenía en julio y, al mismo tiempo, economías que están volviendo a su dinámica regular.
Durante el primer pico de casos, seguido luego por el pico de muertes, Argentina escaló entre los países con mayor cantidad de muertos por millón de habitantes, hasta que Europa entró en su segunda ola, mucho más fuerte que la primera. Una diferencia crucial con varios países de América y Europa: nunca se saturó totalmente el sistema de salud, por fuera de situaciones críticas, puntuales y breves como la de Jujuy, por ejemplo.
Observando la evolución de curva de muertes diarias de coronavirus, se nota cuándo fue el peor momento de nuestro país, coincidente con la merma de casos de Europa y parte de América. A la inversa, ahora Argentina se encuentra en un descenso –muy lento– en la cantidad de víctimas, mientras que los otros países todavía no logran bajar de sus picos. Sobresalen Brasil y Estados Unidos, que siempre tuvieron un altísimo nivel de muertes diarias.
En la comparación de la tasa de muertes por millón de habitantes se puede notar, también, la performance de los países de Asia. Japón, por ejemplo, tiene hoy la misma cantidad de muertos relativos que Argentina tenía a fines de julio, antes de que se disparen los casos después de la flexibilización de las medidas.
