El ajuste del Estado tiene sonido propio, el de las mujeres y hombres que reciben las notificaciones de despidos. En Fabricaciones Militares de Fray Luis Beltrán, Santa Fe, despidieron a 35 trabajadores a fines de 2017. Ayer echaron a 49 más.
Fray Luis Beltrán está al borde del abismo. Buena parte de sus fuentes de trabajo están cayendo, entre el cierre de ArZinc, en 2016, como producto de la quita de retenciones a la minería, y el desguace en curso de Fabricaciones Militares. Ayer notificaron informalmente de los despidos de 49 personas, que se suman a las 35 que se echaron en diciembre de 2017. Los despidos en Fabricaciones Militares también se dieron en Río Tercero (79 trabajadores), Villa María (42) y en la sede central del organismo (20).
Mientras tanto, el gobierno nacional defiende el sendero del achicamiento del Estado, producto de haberse quitado sus fuentes de recursos –vía reducción o baja de retenciones y reforma tributaria–, mientras liquida reservas en dólares del Banco Central en niveles nunca vistos, para financiar la fuga de capitales de los grandes especuladores. No es opinión, es un texto informativo.
La promesa es un futuro venturoso o mejor. En el presente, son personas que se quedan sin laburo. En declaraciones a los colegas de El Ciudadano, el delegado sindical de la Fábrica Militar de Fray Luis Beltrán exclamó: "Se lavan las manos de lo que prometieron a principio de año. No pudieron sostener los contratos ocho meses". Durante la tarde, los trabajadores hicieron cortes de ruta en el acceso a la planta. Así es como reaccionaron ayer a la lectura del listado de despedidos.
Y así fue como reaccionaron en diciembre del 2017.
Muy triste.
Momento en que leen la lista de los trabajadores que son despedidos de la fábrica militar de Fray Luis Beltrán (Santa Fe). pic.twitter.com/V0BxwuPwJS— Sergio Villone (@sergioVillone) 22 de diciembre de 2017
Y esto decía el jefe de Gabinete Marcos Peña en septiembre del año pasado, antes de las elecciones.
22-09-2017: Marcos Peña negaba que hubiese "riesgo de despidos" en las fábricas militares. No pasó un año. A Fanazul directamente la cerraron. Ahora vienen por Río Tercero y Villa María. La mentira, el ajuste y la guerra contra lxs trabajadorxs son las constantes de este gobierno pic.twitter.com/swZfpFoFRV
— Gabriela Estévez (@gabiestevezok) 17 de agosto de 2018
