El IPC de Santa Fe acumuló una suba del 43,4 % interanual, golpeando el poder adquisitivo de las familias de la provincia. Alimentos, bebidas y alquiler son algunas de las categorías que más aumentaron.
Según el Instituto Provincial de Estadística y Censos (IPEC), el Índice de Precios al Consumidor aumentó un 1,4 % en mayo en comparación con abril, mientras que el incremento interanual alcanzó el 43,4 %.
Alimentos y bebidas, junto con vivienda y servicios básicos, muestran las subas más pronunciadas. Los alimentos aumentaron 1,2 % en mayo —con el pan, las galletitas y las carnes a la cabeza—, mientras que el alquiler de la vivienda aumentó 5,1 % en el mes, aumentando así el costo de vida de los santafesinos.
Por la devaluación y la inflación, se acelera la caída de salarios en ciencia y tecnología
Otros grupos que muestran aumentos significativos son la atención médica (+2,2 %) y el transporte y las comunicaciones (+0,9 %). La salud sigue presionando el bolsillo de las familias, junto con el alquiler y el mantenimiento del hogar, que muestran subas muy relevantes en comparación con el año pasado.
Este nuevo incremento del 1,4% en mayo revela que Santa Fe atraviesa una situación inflacionaria constante, sin dar lugar a un alivio para el poder adquisitivo de los trabajadores y trabajadoras. La caída del poder adquisitivo se hace cada mes más pronunciada frente a aumentos de precios que muestran poca señal de contención.